Inspiración: Marie Kondo/ Hygge.

Había terminado de escribir esta entrada hace una semana y Blogger decidió no guardarla. Me demoré un montón en escribirla, así que espero recordar la mayoría de lo que hice antes. Febrero ha sido un mes caótico para mi mente, pero siempre suele ser así (al menos ya terminó). Decidí retomar una de las secciones abandonadas del blog hablando sobre dos temas que me han ayudado para ordenar y decorar mi pieza: el método Konmari y el Hygge.

Si siguen el blog desde hace un tiempo, sabrán que en el 2017 intenté muchas cosas para superar un bloqueo creativo que tenía. Leí varios libros que me inspirasen y dentro de ellos estuvieron estos dos: La felicidad después del orden de Marie Kondo, y Hygge, la felicidad en las pequeñas cosas de Meik Wiking. El primero ya es muy conocido gracias a la serie de Netflix, Tidying up with Marie Kondo, donde vemos cómo implementar el método Konmari para ordenar y organizar la casa, donde lo principal es "mantener las cosas que nos hacen feliz". Me había inspirado en el método para ordenar mi pieza, pero al ver la serie decidí nuevamente ordenar y organizarla, implementando más consejos del método.

El segundo libro habla de Hygge, concepto nacido en Dinamarca que no tiene un significado definido, pero que el nombre del libro lo resume muy bien: la felicidad en las pequeñas cosas. Lo que me gustó mucho de este libro fue la atención de hacer un lugar cómodo y acogedor, no tan sólo enfocándose en las cosas, sino en las experiencias y el ambiente. Me sirvió mucho para incorporar ciertos hábitos en ese tiempo, que admito, ahora no aplico mucho (sin duda voy a re-leer el libro). Aprovecho de mencionar que ambos libros pueden ser algo más que un método de orden (como método de vida o filosofía, etc), pero en esta entrada me enfoco en cómo me ha ayudado para organizar y ordenar mi pieza, el lugar donde paso más tiempo en casa.

CLÓSET.

Marie menciona que para comenzar con el método Konmari, lo ideal es ordenar por objetos y no por ubicación. Empezamos con la ropa, luego los libros, siguen los papeles, luego el "komono" (que son cosas variadas, como de la cocina, baño, garaje, etc) y finalmente los objetos de valor sentimental. Aquí admito que peco bastante, ya que ordeno más por lugar que por objetos, pero digamos que lo fui mezclando y me sirvió mucho.

En cuanto a la ropa, me acomodó mucho el método, ya que se debe juntar toda la ropa en una pila y de ahí ordenar. Esto ya lo hacía cada vez que ordenaba mi clóset, ya que puedo ver toda la ropa que tengo e ir definiendo el lugar de cada prenda. Cuando leí el libro, esta parte es donde más me ayudó la frase de "mantener las cosas que te hacen feliz". Pude dejar ir prendas que no me gustaban mucho al estar puestas, aunque estuviesen en muy buen estado. Esta vez también dejé ir prendas, aunque algunas las dejé para probármelas en invierno y ver si las elimino de verdad.

Por supuesto, el método es súper conocido por cómo se dobla la ropa. Antes lo aplicaba sólo en las poleras, pero en este orden decidí aplicarlas en pijamas, pantalones y ropa interior (este último es el más difícil de mantener). En los cajones es muy sencillo dejarlos doblados, pero en las repisas decidí poner cajas de zapatos y debo admitir que han sido muy útiles. En el maquillaje agregué un canasto donde guardo todo, dejé un canasto en los zapatos y mantengo al lado los que más uso. El lado izquierdo de mi clóset está destinado para materiales de la tiendita, esto fue lo último que ordené, días después del orden general que hice. Me deshice de muchas cosas antiguas que nunca iba a usar, así que fue genial al fin verlo tan ordenado.

CARRO.

Creo que mi carrito se mantuvo casi igual, pero aquí también me deshice de materiales que nunca usaba (como stickers, post-it, etc). Algo genial de este método es que recomienda definir espacios para cada objeto, así que es por ello que esta parte sólo tiene materiales de papelería y pintura. Para organizarlo mejor, he usado unos canastos y organizadores de Casaideas que he ido juntando de a poquito desde hace unos años.

ESCRITORIO.

Mi mayor meta respecto al escritorio era mantenerlo con menos cosas encima de él. No sé si lo cumplí realmente, pero me gusta mucho cómo está actualmente. Hace tiempo que utilizo un canasto para mantener mis libretas ahí, gracias a que las cajas/organizadores tienen un papel importante dentro del método Konmari. Estos permiten definir un lugar a las cosas, además de mantenerlas a la vista de forma ordenada. Ahorita en este orden agregué unos maceteros, frasquitos y organizadores para guardar mis post-it, tijeras y lápices. Son muy prácticos para llegar y sacar las cosas que necesite en el momento. 

Respecto a los cajones, tiene tres mi escritorio, pero sólo dos funcionan (el tercero nunca más abrió haha). En el primero agregué dos canastos que tenía para la tiendita y dejé todos los cables, cargadores y cosas tecnológicas. Esto ha sido genial, porque aunque saque o deje las cosas, siempre se ve ordenado. El segundo cajón lo dejé para carpetas, aquí sí ordené por objeto y junté todos los papeles para organizarlos como menciona Marie: hacer tres pilas categorizadas en pendientes, importantes y variados. Al final me quedaron carpetas ordenadas por papeles relacionados a trámites, ilustraciones originales, papelería y cosas de la tiendita.

MESA DE TRABAJO.

Al medio de mi pieza está otro escritorio, pero que lo llamo mesa de trabajo, el cual siempre me cuesta mantener despejado. Encima de él mantengo mis plantas y un canastito donde tengo cosas para el día a día: billetera, monedero, espejo, llaves, etc. Para llegar y sacar, súper práctico. Además, abajo tiene espacio para dejar cosas, donde mantengo la mayoría de materiales para la tiendita, específicamente cosas para envolver los pedidos. Algo que me ha gustado mucho mantener bonito, son las plantas, agregando platos y bowls con diseños. El libro de Hygge me inspiró en ello, ya que mencionan que lo ideal es agregar cosas relacionadas a la naturaleza (plantas, flores, lana, madera, etc) para mantener un lugar acogedor. Hace unos años tenía otras plantitas, pero como murieron, no quise más. Ahorita volví a tener varias, así que espero estas sobrevivan.

Por cierto, algunas fotos no son actualizadas, ya que tomé fotos en el primer orden general que hice. Otras las tomé al final, cuando definí algunos detalles después de unos días.

CAMA.

Retomando un poquito sobre el hygge, lo que me encanta del libro es que no sólo se enfoca en las cosas materiales, sino que da más énfasis en las experiencias y en el ambiente que se puede crear. Lo principal es mantener un hogar que sea cómodo, acogedor, un lugar donde poder descansar. Aquí es donde mencionan mantener un "hyggekrog" dentro de la casa, que se traduce como "un rinconcito" donde puedas leer, acurrucarte con una manta y tomar tecito (en realidad, un lugar donde puedas relajarte). Esta parte fue la que más me inspiró para dejar mi cama como "mi rinconcito", ya que es donde suelo leer más. Agregué una lámpara que estaba en mi casa para leer con una mejor luz, pero que es cálida, algo importante para el hygge. De hecho, algo característico son las velas, que son la insignia de un ambiente acogedor, pero por más que lo intente, no me pueden gustar.

También agregué una manta (regalo de mi mami), cojines (uno en la cama y otro en la silla del escritorio) y un frasquito donde tengo flores de lavanda (secas). Admito que de aquí no cambié nada en este nuevo orden general, ya que hace dos años que hice los cambios que mencioné recién.

ESTANTE.

Cambié el orden del estante después de tomar estas fotos, me dio flojera tomar unas nuevas, pero se parece bastante. También hice una pila de todos los libros y me deshice de los que no volvería a leer o que no me gustaron. Al final los dejé ordenados en libros por leer, manga e ilustración, autores favoritos y otros. Dejé algunas figuritas, agregué un frasco donde tengo los marcapáginas, una foto y un canasto donde tengo libretas nuevas (regalos en su mayoría). Arriba de él tengo una máscara que hice en mi segundo año de U (o primero, no recuerdo), las bolitas de nieve que coleccionaba y el baúl de recuerdos. Esto fue de las últimas cosas que ordené, ya que mantengo cartas, recuerdos y cosas de mi adolescencia. Al fin me deshice de cosas que ya no tenían valor para mí, así que fue genial poder ordenar esa parte.

ESTANTE PEQUEÑO.

La parte de arriba de este estante es lo que más me encanta de él. Marie menciona que si tienes objetos que te gustan, lo ideal es hacerles un espacio donde puedas verlos y admirarlos. Es por ello que aquí dejé varios que me hacen feliz: una foto de mi familia, una de mi mejor amiga, figuritas con significados, manga y videojuegos, cajitas de accesorios, etc.

Este estante consta de seis cuadrados, donde la mayoría es para mantener ordenados los papeles para imprimir. Otro es para cosas de fotografía donde dejo mis cámaras, otro para cosas de coser, una caja para dejar cosas que no uso por el momento (estuches, manuales, etc) y herramientas. Admito que un espacio lo rellené con cosas que aún no sé si botarlas o dejarlas, pero eso lo veo después. Las bolsas que se ven en las fotos ya no están, ya que las ordené, boté varias y dejé algunas en el clóset de los materiales.

PAREDES.

Esta parte la debo, porque sinceramente, me dio lata ordenarla y cambiar las ilustraciones. No modifiqué casi nada, tan sólo ordené las mochilas que van atrás de la puerta, dejé las bolsas de tela en un colgador en el clóset y agregué un dibujo que me dieron en mi cumple. Quiero darme el tiempo de agregar cosas que me inspiren, revisar fotos y decorar un poquito más. Hasta el momento deseo decorar más la pared grande, agregando algunos marcos de fotos, pero supongo que todavía es sólo una idea.

Espero que les haya gustado la entrada. Les recomiendo ambos libros, me gustaron mucho y hablan más que sólo decorar una pieza (por cierto, los compré en Antártica). En mi caso sólo me sirvieron de inspiración, ya que el método Konmari abarca muchos "pasos" más, como ir ordenando por colores/tamaños, dejar las cosas de forma vertical para poder verlas, agradecer cada prenda que deshechas, etc. Y qué decir del hygge, menciona por ejemplo el "estar presente", ser agradecido, compartir con los seres queridos, hasta es mencionado como la forma de "socialización de los introvertidos" (a mí me ganó con eso haha).

Ojalá me cuenten si han utilizado el método Konmari para ordenar o si conocían el hygge. Espero tengan un muy bonito fin de semana :-)